EL CANTO DE UN MARINO ERRANTE.

[carlos.R.M.C.]

EL CANTO DE UN MARINO ERRANTE.


Hoy que me encuentro ya en tierra con calma me he puesto a recordar mi vida pasada y con orgullo veo que no pase por la vida sin dejar nada, ame y fui amado, con ansia y desdén trate y me trataron pero siempre deje un algo con quien viví esos años, quizás amigos o quizás una amante que en las noches recuerde aquellos momentos felices que pasamos y que al final de sus años ella tal vez recordara con gran agrado.

Yo ahora ni risa ni llanto arrojo por que la vida fue divertida sufrí pero más me reí disfrute del gran banquete que te dan los amigos y la gente que ame y ahora me siento feliz de haber sido así, no me arrepiento de sufrimientos y desesperanzas por que más tuve de buenos días y esperanzas al lado de mis amores, si acaso solo un amor extrañare y siempre llevare en mi corazón aun cuando aquel ya no-lata y seco triste y frió llegue a mi morada ese gran amor que abrace casi desde que tuve uso de razón y que la vida me llevo por él hasta los últimos rincones de su misterio e inmensidad en él quisiera que estuviera mi ultima morada para viajar por el largo camino de la eternidad.

O océano de aguas claras mares del mundo que muchas veces surque hiriendo tus entrañas ahora que te veo cada mañana como añoro esos amaneceres tan rojos y bellos que regalaste para mis ojos y recuerdo bien cuando enojado por tantos abusos que te provocábamos tu nos respondías con una tormenta para que no se nos olvidara que tú eres el emperador de esas inmensidades que no hay nada que te quite el control de los mares que nosotros éramos apenas unos navegantes que en un vano intento de surcar tus aguas no alcanzábamos a entender tus cantos y tus lamentos pasamos como nubes sin tormenta sobre tus aguas sin dejar nada mas que nuestras añoranzas de casa y de la mujer amada que en promesa jurada en el puerto esperaba al marino que viajaba.

Y ahora que ya tus aguas nunca surcare mas que tristeza me causa el saber que no te deje nada, que solo pase por tus aguas sin dejar huella de mi existencia solo los recuerdos que guardo en mis pensamientos sobre tus bellezas me hacen revivir esos días de aventurero navegante que me indujeron a ser un marino errante.

Carlos 27/09/2002