A MI ESPOSA...

[corazón de león]

Hace apenas unos meses, una mañana soleada, ante la mirada de nuestros seres queridos y con la espiritual presencia de tu Padre, Mis abuelos y Tía Nenita, tuve la dicha de que la bendición de Dios, santificara nuestra unión.
Escuchar de tus labios, "Si, acepto", fue la más dulce de las melodias que a mis oidos haya llegado jamás; y decir "si, acepto", fueron las palabras, que desde el fondo de mi alma, a ti amada mia, siempre quise pronunciar.
Fue la feliz culminación de un recorrido largo y sinuoso, un trayecto que recorrimos lado a lado, siempre tomados de la mano, ofreciendonos una palabra de aliento en los momentos de dolor, un soporte ante las adversidades y un corazón abierto para amar y perdonar.
Hoy quiero reconocerte a ti, mi gran esposa, todo lo que me has dado, desde mucho tiempo atras, hasta la fecha; amor, cariño, comprensión, sinceridad y respeto; hoy quiero ofrecerte el corazón entero, el alma y la vida para que las compartamos juntos siempre.
Gracias por ser tu misma, por ser ahora, esposa, amiga y compañera. Te amo.

Con cariño, tu esposo Luis Alberto