MISERIA

[Christian Solis Solis]

Miseria.

Apenas sintió el frío punzante de la navaja, cuando su aliento se extravió en el agudo silencio de la impotencia.
‹‹¡Sangre! ¡Sangre!›› Unas voces testigos entumecieron sus sentidos. ‹‹¡Sangre! ¡Sangre!›› Y sus pensamientos se aferraron a sus últimas lágrimas de dolor.
‹‹¡Hijo! ¿Por qué? ¡Hijo! ¿Por qué?›› exclamó casi sin fuerza, mientras su pesada anatomía desfiguraba con violencia la ondulante armonía de la arena.
‹‹¡Hijo! ¿Por qué?›› Y no se escuchó más.
‹‹¡Asesino! ¡Asesino!›› Las voces reaccionaron indignadas.
‹‹¡Asesino! ¡Asesino!›› Y la turba incontrolable, cual jauría desquiciada se abalanzó contra el pecador.
‹‹¡Piedad! ¡Piedad!›› Suplicó desesperado el parricida.
‹‹¡Piedad! ¡Piedad!›› Más sus gritos se perdieron en su aliento: mezcla de pasta y alcohol
El quebranto de la noche va empapando la barriada; y bajo el hálito marchito que solo la miseria humana provoca, una madre sollozante se aferra fuertemente al cuerpo inerte del marido y, a los despojos sangrantes que quedaron del hijo.
‹‹Dios mío ¿por qué?, Dios mío ¿por qué?›› Reclama desquiciada al cielo la humilde madre.
‹‹Dios mío ¿por qué?, Dios mío ¿por qué?›› Y sus manos temblorosas se deslizan suavemente y arrancan la navaja clavada en el abdomen sangrante del marido.
‹‹Madre ¡no! madre ¡no!›› Le gritan suplicantes las voces que la rodean. ‹‹Madre ¡no! madre ¡no!›› Pero ya es tarde, la navaja ahora se apodera inquebrantable, del frágil vientre de la desdichada madre
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Christian Solís Solís

[amayte]

Hay Cristian...no se que decirte, .........
esta ha sido una de las creaciones mas
fuertes que he leido esta tarde....
solo decirte que aqui estoy presente.
Cariños.Mary