Vivo en una ciudad....

[*PARA*PARA*]

<center>Vivo en una ciudad que descansa plácida ante la sombra de su fama, fama de ayeres lejanos que convirtieron a estas tierras en paradisiáticos parajes. Una ciudad que goza de buen nombre por lo que fue y ya no será, un lugar de bellezas inimaginables, tierra de fantasías inalcanzables, tierra bipolar donde se une y se separa en una extraña mezcla, incolora e insabora, lo mas bello con lo mas mundano.

Vivo en la ciudad azul turquesa, inspiración y musa de infinidad de músicos y poetas, que ensalzan y endulzan con sus letras la absurda realidad. Ciudad de blanca arena, fina como el polvo, tierna bajo tus pies al andar, fresca compañera de paseos en familia, amiga del deporte, cómplice de amantes, arena nuestra que se ensaña en mostrarse orgullosamente blanca frente al profundo azul del mar.

Tierra silvestre de fauna exótica, de tucanes multicolores y de escandalosas chachalacas; del místico jaguar; de zarigûeyas o zorritos como la gente oriunda de la región los prefiere llamar; tierra de serpientes, boas constrictor y ratoneras, de la temible nauyaca o cuatro narices; del pesado manatí en sus lagunas y del ligero venado cola blanca en sus selváticos paisajes; tierra de manglares poblados de lagartos; tierra de peces multiformes, coloridos y admirables, habitando el mas extenso arrecife coralino del continente Americano; tierras de clima cálido casi todo el año.

Vivo en la ciudad que muchos anhelan, y otros tantos desdeñamos, mas no se entienda mi desden como un arma filosa que en lugar de mejorar destruye por el simple hecho de una inconformidad malsana. No, mi desdén versa distinto, versa al clamor de una justicia imposible de alcanzar, y grita impasible en el silencio esas verdades que el vulgo pretende acallar.

Vivo en una ciudad mancillada por el hombre, una ciudad que escupe arrogante al mundo su gran nombre mientras arrolla con carencias su escondida intimidad. Tierra de corruptos, de vendidos, de procaces asesinos que por unos cuantos pesos destruyen la belleza natural que nos rodea; tierra de serpientes viperinas que se venden en la imagen de una ciudad primermundista.

Tierra de cobardes conformistas, que no dan para delante o para atrás; de señoras chacoteras que no hacen mas que chillar cuando se inunda la calleja en los días de tempestad; tierra de niños apagados, de juventud vacía, de adultes sin compromisos. Tierra del ¡no importa! , del ¡mañana puede ser! del ¡mirar sin comprender! del ¡hablar sin razonar!. Tierra de ¡la culpa es del gobierno! por sus ¡malos manejos!. Tierra sombría enterrada en suciedad.

Tierras de basura, de papeles y botellas en las playas; de grandes hoteles devorando arena, vida y mar; de grafittis pintorescos en las casas; de parques descuidados; de aceras rotas; de carreteras sin pavimento; de casas, casitas y casuchas esparcidas sin lógica alguna en irregulares asentamientos; Tierra de explotadores y explotados, de veneración agringada, de desmedida adoración al dios de papel verde.

Tierra del hambriento contrastando con el hastiado, tierra del que trabaja de sol a sombra para llevarse a la bolsa tristes cincuenta pesos diarios. Tierra de todos y tierra de nadie.

Ciudad decrepita que en la avaricia, lujuria y arrogancia, nos entierra poco a poco en la más fútil realidad.

Mi intención no es ofenderte ¡Cancunense! mientras en mi loco afán por la utopía, golpeo con reprochadora fuerza las teclas de mi voz. Mi intensión no es aludirte en ninguno de mis pasajes, ni señalarte con el dedo cuando tires tu botella con descuido en tu acelerado paso; Mi intensión, no es llamarte ciego, sucio, conformista, o pobre o chacotero. No intento insultarte a ti gobierno, o a ti empresario al cantar con mis lamentos tus asquerosos tratos; No intento en modo alguno herir tu sensibilidad de lector.

Más, ¿Por qué no gritarte tus verdades?


Edith Curiel
Derechos Reservados
Enero 2007</center>

[RUBEN859532]

<CENTER>Mi estimada amiga, imprecionate carta llena de muchas verdades que solo el que vive ahi en tu ciudad podra enteder a la perfecion tus heridas palabras, sin mas no deja de ser un llamado a todo aquel que tiene un poder, que al no saber hacer las cosas , la gente paga su arrogancia...
fue un placer el recorrer tu jardin y dejar mi huella amiga...
tu amigo
RUBEN

[*PARA*PARA*]

<CENTER>Mi estimada amiga, imprecionate carta llena de muchas verdades que solo el que vive ahi en tu ciudad podra enteder a la perfecion tus heridas palabras, sin mas no deja de ser un llamado a todo aquel que tiene un poder, que al no saber hacer las cosas , la gente paga su arrogancia...
fue un placer el recorrer tu jardin y dejar mi huella amiga...
tu amigo
RUBEN

Gracias precioso por entar en mis espacios y leer mis reproches je je.

Un gran beso.

[Cynthia Gallardo]

<center>Querida amiga
Vaya carta nos dejas, una hermosa ciudad relatada hasta
en los minimos detalles que te transportan hasta allá.
Un placer recorrer tus letras
Un beso y un abrazo a la distancia con cariño

[Maryana]

<center>

Un grito de auxilio dejas en tus letras para que entre todos los de tu nación unas las manos y hagan por esas bellas tierras que serán la herencia de los niños que son el fututo del mundo, bello aporte como inspiración y es un verdadero honor poder dejar mi humilde huellita y con ella dejarte mis respetos y admiración y que Dios padre todo poderoso siga llenando e inundando tu ser de enormes bendiciones y como siempre te dejo mis besitos balsámicos