REHOLAS WAPAS, AKI UN INTERESANTE ARTICULO, SOBRE LO KE LA MAYORIA DE LAS MUJERES HEMOS SENTIDO 
Obsesionadas con la belleza
Tú eres hermosa simplemente por ser mujer. Alta, bajita, delgada, llenita o como seas, la verdadera belleza está en tu interior, valórate porque eres única.
Por: FMU/ Carmen Ortiz Esquivel
Clara era una chica muy guapa, pero ella nunca lo creyó; pasé buena parte de mi niñez observándola... en medida que fuimos creciendo, me di cuenta que comenzó a frustrarse. Comenzó por echarle la culpa al grosor excesivo de sus labios. Ella pensaba que las chicas bonitas eran sólo las que tenían la boca tan delgada como Lady Di.
Cuando los implantes de botox en los labios comenzaron a ponerse de moda, dejó de preocuparse por eso y se fijó en su mentón, decía que el complemento perfecto para una boca sexy era una “barbilla partida”.
En esa época no era económicamente accesible para la mayoría de la población, la cirugía estética, únicamente se sometían a ella las actrices de Hollywood, aún así, juntó dinero y decidió cambiar la forma de su nariz, pues aseguraba que la tenía “chueca, grande y horrible”, que tenía aspecto de “bruja”; a mí me parecía normal, hasta le daba armonía a su rostro. Lamentablemente, su nueva nariz trajo el asma a su vida y constantes visitas a la sala de urgencia.
No importaba que todos le dijéramos que era atractiva, ella estaba empecinada en no creerlo. Después del episodio de la nariz, vino una nueva fijación y rechazo: su cabellera. No obstante, su cabello era objeto de constantes halagos, pues era una hermosa cascada de rizos negros que le llegaban hasta la cintura; mas ella odiaba su look, ya que era diferente al de sus compañeras: lacias y güeras. Contra toda sugerencia, decidió cambiarlo.
Por temporadas se sentía muy delgada, entonces compraba aparatos de masaje que ella aseguraba “levantaban” el busto y los glúteos, haciéndolos crecer; luego se volvió vegetariana, para justificar su ausencia en una mesa de “carnívoros”; finalmente dejó de comer, cada bocado que probaba, le provocaba náuseas, vómito y hasta asfixia. Cuando se embarazó, pasó varios meses postrada en cama, pues estaba demasiado débil para levantarse.
Ha sido una época oscura para ella, pero también para otras muchas mujeres que no son, como erróneamente creemos, vanidosas empedernidas, sino que padecen de la enfermedad conocida como Dismorfia Corporal.
Este padecimiento consiste en una apreciación distorsionada y negativa del propio físico, lo que genera una excesiva preocupación y angustia desmedida por la propia imagen que no logra equipararse a los modelos impuestos por la sociedad y los medios de comunicación, lo cual impide llevar una vida normal, plena y satisfactoria.
ESPERO LES HAYA GUSTADO.
BESOS MIL MUAK
