Flores de mi jardín.

[Héctor Omar Masi]

Capitulo quinto.
Flores de mi jardín.

1. Flores de mi jardín.

Corté una flor azul, de mi jardín soñado,
cubrí con ella, un segundo el corazón,
y pude ser entonces, un hombre ilusionado,
cuando sentí en el pecho, una nueva pasión.

Y luego recorrí, con mis dos ojos,
la imagen del paisaje, que quedaba,
buscando pétalos, de encantadores rojos,
que a veces, en mis lagrimas llevaba.

Y pude ser feliz, en primavera,
en la mañana de sol, que es codiciada,
por los que viven, fijándose en la seda,
y no descubren, las huellas demarcadas.

2. Sediento de ilusión.

Cuando comienzo a escribir unas palabras,
vibra mi pecho sediento de ilusión,
sueño con ninfas y luces que me alcanzan,
y alzan al cielo mi dulce corazón.

Pienso en el tiempo de dicha verdadera,
vuela mi eterna paloma del amor,
y me entretengo entre flores de colores,
que se componen brillando a pleno sol.

Y soy compleja unidad aventurera,
que va buscando la forma de vivir,
alegremente centrado en mi existencia,
e independiente del diario convivir.

3. Imagen azul.

Si es el azul la imagen del presente,
es el momento que debes disfrutar,
sin cuestionarte por tenues circunstancias,
y valorando tu hermosa realidad.

Porque tan solo se puede ir dando al mundo,
si es que iluminas tu forma de pensar,
y le regalas sonrisas verdaderas,
en la que brilla tu ley existencial.

Y simplemente tu andar con alegría,
es un sumando en la lucha del pasar,
por esta vida sintiéndote dichoso,
porque empujaste a los hombres a soñar.










4. Descubro en la piel.

Mil sensaciones descubro en la piel,
cuando recorro mi imagen completa,
y soy sencillo y prudente querer,
cuando me esparzo a la luz del planeta.

Me gusta hallarme sentado en el sol,
sintiendo toda su fuerza en mi esencia,
y consiguiendo el calor interior,
cuando me aferro a mi tierna conciencia.

O simplemente me esmero en pasar,
todas mis horas con dulce paciencia,
cubriendo al mundo de hermoso ideal,
de idiosincrasia, saber y presencia.

5. Con trabajo y mucha calma.

Sencillamente te pido que me escuches,
que me dediques un poco de tu ser,
para que puedas saber que estoy pensando,
y simplemente me llegues a entender.

Soy hombre de decir sinceramente,
la verdad de mi vida sin pintarla,
y busco el ir creciendo con mi gente,
de a poco con trabajo y mucha calma.

Y espero que algún día mi Argentina,
cobije a nuestros hijos con orgullo,
después de atravesar senderos duros,
cubiertos de miseria y pedregullo.

6. En una rosa alegre.

En una rosa en que habita la alegría,
los visitantes del reino de la flor,
sueñan canciones de luz y fantasía,
pintan contornos brillantes de color.

Y en su elegante jardín de la armonía,
me gusta verla serena bajo el sol,
siempre elocuente, fragante de poesía,
que da esperanza al azul de mi ilusión.

Y el cielo se hace su dulce melodía,
que nuevas horas espera del amor,
mientras mi clima genera un nuevo día,
con su influencia notable alrededor.










7. De corazón a corazón.

De corazón a corazón buscando bienvenidas,
viaja mi rima forjada en el amor,
y va encontrando mil almas parecidas,
que van nutriendo a otros versos con calor.

Mi fuego crece en la llama de otra vida,
y mi palabra es mensaje emprendedor,
mientras escucho otras voces decididas,
a acompañarme en mi empresa con valor.

Y es festival de letras y poesía,
sencillamente segundo encantador,
cuando sus notas se juntan con las mías,
en singular adagio seductor.

8. Quisiera mirarte.

Quisiera mirar con dulzura tus ojos,
hablarte de un tiempo de dicha y amor,
y ver que me escuchas y sientes que el cielo,
se acerca a la tierra y te encuentras mejor.

Seguir conversando de lunas y estrellas,
de bellos jardines de hermoso color,
y ser tu seguro camino fraterno,
cubierto de rosas de humilde valor.

Y darte la mano marcharme en un beso,
seguir por la vida confiando en el sol,
que juntos hallamos charlando en la tarde,
dejando de lado al mundo y su rol.

9. Dicha y amistad.

Se oculta el sol la tarde se termina,
y lentamente comienza a oscurecer,
mientras tranquilo descanso esperanzado,
en nuevas horas brillantes de querer.

Mi casa espera el llegar de los pequeños,
con sus vivencias que nutren al hogar,
y que nos cambian la vida simplemente,
con su amorosa manera de celar.

Y ante mis ojos el mundo se renueva,
como milagro de tierna realidad,
junto a mi hermosa y sincera compañera,
en este tiempo de dicha y amistad.










10. Claves de amor.

Con plenitud comienzo a andar el nuevo día,
buscando espacios abiertos a mi ser,
y me entretengo en senderos de armonía,
mientras mis notas se empeñan en crecer.

De vez en cuando un sonido entremezclado,
desequilibra la esencia de mi piel,
y simplemente me pierdo atosigado,
entre sabores que amargan a mi miel.

Pero a la larga es bajante la marea,
y mi conciencia recobra el esplendor,
para volver a encontrarse en la tarea,
de ir entonando en las claves del amor.

11. Cultivando sueños.

Cuando me siento a escribir serenamente,
vibra mi pluma en compás de amor y paz,
y abren mi mente mis tiempos del silencio,
mientras cultivo mi forma de soñar.

Vuelo tranquilo aleteando entre las brisas,
que soplan dulces costumbres del lugar,
y soy espacio perdido en el presente,
que se ha empeñado en constante perdurar.

Y mientras tanto presiento otro mañana,
que simplemente descubra ese color,
de un mundo nuevo bañado en sentimientos,
que le permitan sentirse algo mejor.

12. Activando mi ser.

Me pierdo en el cielo detrás de las nubes,
y encuentro en el pecho el color del lugar,
descubro momentos serenos y hermosos,
y al paso del tiempo me dejo llevar.

Mi mente regresa feliz del paseo,
contento me juego por ver vivenciar,
matices sublimes que puedan abrirme,
caminos y tiempos que enseñen a andar.

Y el mundo es testigo del sol que me alcanza,
cubriendo mi cuerpo en ardiente placer,
y vuelvo a mis años de niño y de joven,
cantando canciones que activan mi ser.










13. Hablando de amores.

Hablando de amores que viven la vida,
jugando momentos de luces y sol,
soñando otros tiempos y dulces colores,
que llevan la esencia de risa y de flor.

Pensando en un mundo cubierto de dicha,
de mil corazones latientes al son,
de gente que quiere y que nutre sus días,
con letras doradas de bella canción.

Y armando mi pecho con todo el motivo,
que lleva profundo mi ser interior,
y es suave perfume plateado pañuelo,
que agito en mi alma con tierna emoción.

14. La corriente del amor.

Sentir esencialmente que la vida,
renace cada instante con amor,
es parte de un saber contribuyente,
con toda una corriente de valor.

El hombre emocionalmente bondadoso,
que trata a sus hermanos con dulzura,
su dicha va forjando en nuevas formas,
que surgen de la luz de su ternura.

Y todo se encamina a un horizonte,
de espléndido y brillante amanecer,
que vibra con el ángel de tu tiempo,
que vive ilusionado en el querer.

15. Pensando en vos.

Pensando en vos y recordando que me lees,
y que resuenan mis versos en tu ser,
quiero entregarte mis sueños más felices,
en cada letra que empieza a florecer.

Buscando dulces palabras que se encuentren,
con la más simple pureza de tu ser,
puedo dejarme llevar por los sentidos,
y regalarte mis ganas de querer.

Y lentamente pretendo ir avanzando,
en ese nuevo y alegre conocer,
que va naciendo de a poco lentamente,
en nuestro mutuo y profundo comprender.










16. Buscando luces.

Buscando luces que alumbren los momentos,
que van pasando a lo largo de mi vida,
voy recorriendo mis tiempos simplemente,
mientras presiento miradas encendidas.

De vez en cuando me pierdo en un segundo,
en que el instante se vuelve tan intenso,
que me señala sus huellas en la mente,
y modifica las formas en que pienso.

Después encuentro nuevos equilibrios,
donde mis modos se muestran diferentes,
para seguir caminando en mi sendero,
siguiendo soles que me hablen del presente.

17. Rima y amor.

Cuando ha nacido mi rima de amor,
solo me falta entregarla a la vida,
para que encuentre la luz interior,
que le de magia y sencilla armonía.

Y yo la quiero poder apartar,
de los mercados que opacan los días,
para poder apuntarla hacia el sol,
con mil sencillas palabras genuinas.

Entonces quiero escribir al compás,
sin desviarme en amargos motivos,
y solamente volver a soñar,
mientras te muestro que siento y que vivo.

18. Motivos humanitarios.

Cuando descubro la luz del horizonte,
que lentamente comienza a levantar,
amaneciendo en nuevo día floreciente,
late mi pecho con ganas de soñar.

Lucha mi mente en favor de nuevos tiempos,
donde resida la noble dignidad,
y soy soldado valiente del presente,
que se ha empeñado en rescatar la humanidad.

Y entonces busco mil brazos que se acerquen,
que me acompañen en mi modo de buscar,
y en muchas partes encuentro simplemente,
hombres con dulces motivos para andar.











19. Ideas divinas.

Ideas divinas que buscan un cielo,
con pies en la tierra y brillante de amor,
formado por hombres de dulces anhelos,
que buscan la brisa y el tenue calor.

Que bregan por tiempos abiertos al mundo,
con luces cubiertos de tierna ilusión,
y fuertes pilotes de anclajes profundos,
que alegren al núcleo de nuestra Nación.

Dorada Argentina te quiero y espero,
poder descubrirte luciendo mejor,
y voy por la vida con fuerza y esmero,
pintando en tu pecho mi sueño en color.

20. Palabras sutiles.

Palabras sutiles quisiera decirte,
contarte mi esencia ferviente de amor,
y hablarte de luces que llegan del cielo,
de bellos jardines de hermoso color.

Sentarme a tu lado seguro y dichoso,
seguir conversando de ayer y de hoy,
de miles de cosas que llevo prendidas,
con fuego y platino en mi ser interior.

Y ser simplemente tu amigo sincero,
que puede escucharte y sentir tu dolor,
buscando brindarte mis aguas serenas,
que puedan llevarte a un mundo mejor.

21. Buscando detalles.

Camino en el mundo tranquilo y sereno,
buscando detalles que alumbran al sol,
y rimas de luces, de lluvias y cielo,
que brillan mostrando su suave fulgor.

Con tiernos bebitos riendo contentos,
con madres que nutren su esencia de amor,
y niños que juegan seguros y atentos,
a ser los más fuertes y ser el mejor.

Y puedo sentirme feliz de mi vida,
de todo este tiempo en que pude reir,
soñando con cambios y nuevas medidas,
que brinden ayuda al diario existir.









22. De luces y flores.

Deseo en la vida cubrir mis momentos,
de luces y flores de bello color,
y busco la forma de hallar el motivo,
que encienda a mi tiempo en regalo de amor.

E intento encontrarme en la senda dichosa,
que puedo brindarme el ilustre saber,
que quiero llevar en mi pecho incluido,
venciendo a lo falso y logrando crecer.

Y voy por la vida detrás de caminos,
siguiendo mil huellas que marcan un rol,
que espero encontrar con mi sonda viajera,
que va navegando con rumbo hacia el sol.

23. Añorando mi juventud.

Añoro a mi parque y aquellos partidos,
los juegos, las risas, doradas de ayer,
y el alma encendida soñando a ser grande,
mi escuela querida y mi tierno crecer.

Recuerdo dichoso las horas pasadas,
me llena de vida de luz y de amor,
el verme pequeño pensando en mil cosas,
rodeado de amigos y dulce candor.

Y el tiempo no cambia y estoy sorprendido,
me han visto escondido, me dicen que es hoy,
y entonces me siento feliz con mis horas,
sabiendo que he sido, creyendo que soy.

24. Alegres momentos.

De paz y alegría he encontrado momentos,
preciosos brillantes que hicieron crecer,
saberes preciados que abrigo en mi mente,
y entrego a la gente con dulce placer.

Mis ondas aquietan la calma del tiempo,
mi eterno camino es mensaje de amor,
y espero que un día coseche sus frutos,
en niños abiertos a un mundo mejor.

E intento cambiar los distintos destinos,
sembrando palabras que puedan llegar,
a hallar otros rumbos que marquen las huellas,
que muestran que es hora de andar y soñar.










25. Profundidad y amor.

Profundidad y amor van de la mano,
cuando coexiste a la vez serenidad,
y en cada frase se busca ir conquistando,
el corazón con la dulzura y la amistad.

Cuando se deja de lado el egoísmo,
y se comienza a sentir la realidad,
con esa fuerza que viene desde adentro,
como la lava ardiente de un volcán.

Y se derrama calor entre el entorno,
como mensaje de luz y de verdad,
en cada instante preciado de la vida,
en que se puede encontrar felicidad.

26. Sediento de luz.

Busco el amor como sencilla consecuencia,
de ir aprendiendo diariamente un poco más,
e ir caminando detrás de mis Maestros,
como afinando mi forma de pensar.

Y simplemente recorro mi existencia,
con la segura y confiable convicción,
que han de marcarme el rumbo solamente,
para que pueda enfocar el corazón.

Mientras me siento feliz de estar viviendo,
en la armonía profunda de mi ser,
que se refleja en mis horas cotidianas,
y me regala la esencia del querer.

27. Mañana lluviosa.

Alcé mis ojos mirando allá a lo lejos,
en la mañana grisácea de mi parque,
y el agua fresca noté sencillamente,
con mil matices preciosos y brillantes.

Mientras las copas de verde se juntaban,
como anexando los cielos a los árboles,
y vi veredas y flores en las casas,
con sus ventanas, sus puertas y sus mármoles.

Y simplemente se fue pasando el tiempo,
se iba acercando el momento de marcharme,
con la serena impresión de haber sentido,
en mi interior algunas formas de expresarme.










28. Buscar y encontrar.

Mi esencia me lleva a decir que quisiera,
leerte mil rimas que son mi verdad,
que llevan mi vida cargada en sus alas,
y son gran motivo de andar y soñar.

Mis ojos se cierran y escuchan sonidos,
que siguen compases de suave brillar,
y es tiempo de luces rodeadas de fuego,
que marcan mis horas de un bello soñar.

Entonces comprendo los soles de enero,
las tardes de marzo y el dulce pasar,
de abril en mi casa rodeando a los míos,
sintiendo que puedo buscar y encontrar.

29. Vuelta del corazón.

Sentí mi corazón latir dentro del pecho,
y fui emoción vibrante contenida,
como redonda en silencio a cuatro tiempos,
que presagiaba el brillar de otra partida.

Después pasó un momento simplemente,
y las vivencias cambiaron el entorno,
para mostrarme segundos más estables,
llenos de paz marcando los contornos.

Y todo terminó como empezara,
con cada cosa volviendo a donde estaba,
mientras soñaba mil formas diferentes,
de ir realizando la próxima jugada.

30. Esperando mensajes.

Si no comprendes las rimas conque canto,
o es que no entiendes las cosas que te digo,
no es importante tan sólo es secundario,
lo que quisiera es que sientas que estoy vivo.

Que algo de luz brilla en mi humilde pensamiento,
y que comparto con muchos el motivo,
de ver crecer de tanto en tanto la nobleza,
entre los hombres de soles encendidos.

O solamente, que leas tiernamente,
como ignorando la esencia y contenido,
para perder tu mente un poco en mis palabras,
que van buscando un sonar entretenido.










31. Recuerdo de mi calle.

Recuerdo un mediodía en Cachimayo,
a Omar que caminaba hacia a la esquina,
algunos rayos del sol que un poco se reflejan,
y el ir surgiendo a la luz mi primer rima.

Después la caminata hasta mi parque,
y el 26 que me llevara hasta al colegio,
mientras mis versos sonaban en mi mente,
y yo cambiaba al compás algún arpegio.

Para al final volver sereno hasta mi calle,
y celebrar jugando rodeado de alegría,
mientras llevaba grabado aquí en mi pecho,
una flor nueva con forma de poesía.

32. Mi vida y mi poesía.

Son treinta largos los años que pasaron,
desde que uniera mi vida a la poesía,
y tantas letras me dieron tanta fuerza,
tanta pasión, dulzura y alegría.

Algún “Destello”, “una Flor”, un sentimiento,
que late en lo mejor del alma mía,
y trata de expresarse entre mis temas,
buscando trascender con armonía.

Y todo puede renovarse solamente,
apenas con que busque y que consiga,
la estrofa de otros tiempos archivada,
y pueda disfrutar con lo que diga.

33. Sereno y Argentino.

Quiero llevarme del brazo de la vida,
algunas rimas, una ilusión y la esperanza,
de que haya un día con horas casi justas,
aunque a lo lejos mi vista no lo alcanza.

Pienso olvidarme de todo y simplemente,
ir caminando al encuentro de otros soles,
cuando me llame el Señor desde lo alto,
y se terminen mis cuadros y bemoles.

Y dulcemente marcharme como vine,
con la tibieza de un paso hacia el destino,
y la segura idiosincrasia de haber sido,
un hombre noble, sereno y Argentino.










34. Creyendo en la alegría.

Vivo sabiendo que mi vida y que mi lucha,
se fue plantando en el terreno que debía,
con la serena estrategia del que busca,
un mundo justo en el que reine la armonía.

Sé que mis fuerzas se expresan con palabras,
y que mi tiempo se encuentra detrás de la poesía,
que le permita ir afinando a los presentes,
las notas claves del sol del mediodía.

Y lentamente me pierdo entre mis versos,
para decirte las cosas que quería,
con la elegante cadencia de mis rimas,
y mis ideas creyendo en la alegría.

35. De la mejor manera.

De la mejor manera, que he encontrado,
fui resolviendo los temas de mi vida,
tratando dar mi corazón en cada tiempo,
como buscando mil luces encendidas.

Fui un niño dulce también un poco ingenuo,
que fui creciendo dorado en la poesía,
mientras mi escuela, mis libros y mi casa,
marcaron huellas que hicieron a mi vía.

Después vinieron tiempos diferentes,
aquellos bailes, mis bellas compañías,
y el despertar a algún amor y simplemente,
la realidad de una bohemia melodía.

Y hoy es mi esposa, mis hijos, mi familia,
el despertar luchando cada día,
por ver crecer a los míos tiernamente,
forjando nuevos caminos de alegría.

36. Pensando en el mundo.

Si cada cual iría ocupando con esmero,
ese lugar en el mundo en que camina,
sencillamente podrían ir cambiando,
todas las luces que excitan la retina.

Y una visión de los hombres surgiría,
que integraría reformas florecientes,
nacidas entre mentes que se encuentran,
buscando nuevos modelos diferentes.

Para llegar a niveles de energía,
sabiduría y talentos excelentes,
que den a todos mil horas de alegría,
y de futuros proyectos concurrentes.





37. Hablando de amor.

Puedo expresar en mil palabras tiernamente,
que te dedico simplemente el corazón,
cuando te miro y te regalo una sonrisa,
mientras me pierdo en una dulce sensación.

Puedo mostrarte el sol, la luna, y las estrellas,
cada segundo y minuto de mi amor,
que van pasando sencillamente ilusionados,
como el perfume que emana de una flor.

Y hasta entregarte algún latir del universo,
o el más hermoso y dorado amanecer,
que va alumbrando las fibras de mi alma,
y hasta conmueve la esencia de mi ser.

38. Analizándote.

Detrás de ese fuego que habita en tu alma,
se esconden las aguas, de amor y de paz,
que habrán de brindarte, las horas de calma,
de luz y de dicha, que puedes soñar.

Y el cielo se afianza forjado en tu núcleo,
la rosa del viento te lleva a pensar,
que el tiempo se acerca y te abraza en su pecho,
y es nuevo el presente, seguro de andar.

Y entonces la vida, se acuerda del niño,
que existe en tu forma de ser y luchar,
y hay Sol en la Tierra y risas sinceras,
que incitan a un dulce e intenso volar.

39. De Sol y luz.

De Sol y luz nace la esencia de la vida,
de Tierra y agua puede nutrirse el corazón,
y en la mañana dorada de mi vida,
vibro feliz al congeniar con tu ilusión.

Y en cada nota, cada fragancia y en tu pelo,
sueña mi pecho encontrarse con tu ser,
para llevarte prendida en mi conciencia,
como mi flor del tiempo alegre del querer.

Mientras te duermes confiando dulcemente,
y es el momento en que empieza a soñar,
esos motivos que reinan en tu mente,
y que trasmiten tus formas al andar.









40. Horas del querer.

Nace el color en la mañana de la vida,
cuando tu pecho recubre el corazón,
serenamente con flores de alegría,
que abren al Sol tu núcleo de ilusión.

Y entonces surgen tus luces del presente,
que van andando caminos de razón,
donde tu mente se aferra al pensamiento,
y al despertar buscando otra ilusión.

Y el sentimiento comienza a destacarse,
como mensaje que vibra con tu ser,
en la elocuente fragancia y la elegancia,
que van formando las horas del querer.

41. Tiempo de miel.

Como volando al compás de algunas notas,
vivo sereno este nuevo despertar,
lleno de risa, de dicha y entusiasmo,
dulce milagro de encuentro de mi sal.

Sueño despierto con bellas fantasías,
y mis presagios comienzan a encender,
cada momento de luces de poesía,
que va formando la esencia de mi ser.

Y simplemente me siento comprendido,
en una onda suprema de placer,
en que transcurren momentos amorosos,
como sabores que saben a la miel.

42. Dulces compases.

Con cada rima, cada palabra, y cada letra,
mi corazón vibra radiante de ilusión,
cuando mi esencia sublima en el presente,
y es realidad el bienestar de la ocasión.

Y en cada estado que llega hasta mi pecho,
late vibrante mi inseparable seguidor,
como marcando las notas del solfeo,
que va escribiendo en su gracia el Creador.

Y existe un ritmo que siento y que me muestra,
cada compás de las vivencias al pasar,
en cada instante que vivo satisfecho,
de mi modesto y sencillo deambular.










43. Sueños Argentinos.

Quise quedarme a vivir en la Argentina,
porque mis sueños querían renovarla,
de tantos temas teñidos de rutina,
para poder de algún modo despertarla.

Y avance un poco, logré ir viendo detalles,
que puntualmente me hablaron de otros vientos,
de dignidad de dicha y esperanza,
en nuestra patria bruñida en contratiempos.

Y supe entonces que tengo pocas horas,
que llegan lentos los cambios a la gente,
pero que debo seguir mi lucha firme,
si es que pretendo futuros diferentes.


44. Canción de amor.

Puedo cantarte con voz de enamorado,
estas estrofas que reflejan mi pasión,
y regalarte el corazón en mis palabras,
cuando me pierdo en tu agradable sensación,

Siento que el cielo se estremece ante mis ojos,
mientras la Luna se descubre junto al Sol,
y cada estrella me recuerda tu mirada,
con su brillante destello embriagador.

Que se ha prendido entre mi esencia dulcemente,
para ir buscando una ilusión para los dos,
en esta vida que vivimos diariamente,
sencillamente reflejada en relación.

45. Pese a todo.

No entiendo bien al mundo ni a sus formas,
el modo en que se mueve al accionar,
de todas las personas que lo abarcan,
y marcan a su sello colosal.

Me faltan ecuaciones en la cuenta,
y acaso alguna estrofa en el rimar,
que solo pude a veces encontrarla,
sentada en el diván de mi ansiedad.

Mas vivo simplemente como todos,
contento de mi diario caminar,
y río pese a todo en esta vida,
seguro de mi forma de pensar.









46. Deseos nocturnos.

Deseo dormirme a tu lado simplemente,
mientras percibo el aroma de tu piel,
para soñarte rodeada entre mis brazos,
y conquistar tus encantos de mujer.

Quiero encontrar tu mirada con la mía,
en un cruzarse de azúcar y de miel,
cuando mi esencia se junta en tu regazo,
y me descubro latiendo con tu ser.

O nuevamente sentirme plenamente,
como entonando en la escala del amor,
en esta noche de orquídeas y recuerdos,
que me regala tu imagen en color.

47. Delicias de la vida.

Momentos sublimes a veces me alcanzan,
me llenan de dicha de fe y de ilusión,
y entonces mi vida se viste de luces,
que alumbran mis horas de sol y emoción.

Son fuego sagrado que llena mi pecho,
dorados contactos de justo accionar,
que dan a mi mente segundos de vuelo,
y enseña mi mundo a quien quiera mirar.

Delicias supremas que son tiernamente,
mensajes de tiempos de dulce sabor,
que me hace sentir que no importan los tumbos,
si encuentro la llaves de un mundo de amor.

48. Mensaje Navideño.

Quiero brindar con todos los amigos,
con dulce idiosincrasia existencial,
por todas las personas que reúne,
la esencia que se nutre en “El Portal”.

Es de “Poesía Virtual” toda la dicha,
de hallar esa manera de reunir,
a tantos elegantes escritores,
dispuestos a pelear por el vivir.

Y en estas Navidades es un gusto,
alzar alta mi copa nuevamente,
pidiendo que sigamos siempre juntos,
tratando de ayudarnos mutuamente.










49. Pidiendo amor.

Pidiendo amor pretendo ver entre la gente,
semillas de una vida algo mejor,
de alguna sociedad algo más justa,
marcada en una escala de valor.

Quisiera una sonrisa del más pobre,
y acaso del que sufre más dolor,
sembradas en un mundo humanitario,
de noble sentimiento y corazón.

Pidiendo amor pretendo humildemente,
lograr muchas más ganas de vivir,
tratando de salvar los desafíos,
que cubren a la faz del existir.

50. Dulzura y suavidad.

Voy caminando a lo largo de la vida,
con la intención de poder amenizar,
la realidad del presente y el futuro,
con mis dos armas, dulzura y suavidad.

Vivo sembrando a la vera del camino,
diversas flores abiertas hacia el sol,
para mostrarle mi sueño a mis amigos,
que se ha nutrido en la savia del amor.

Y simplemente reflejo en cada rima,
cada milagro que encuentro alrededor,
donde nobleza en esencia se adivina,
como la imagen de cada corazón.

51. Bellos momentos.

Bellos momentos recuerdo de la vida,
como gigantes del ser de mi interior,
que me regalan las luces preferidas,
de mi camino pintado de color.

Y en un instante me siento sorprendido,
cuando aparece otra joya de valor,
en la vivencia de un día inesperado,
en que mi ser se ha cubierto con el sol.

Para mostrarme matices diferentes
como soñados reflejos de ilusión,
que le dan tono y matiz al contenido,
de primavera , de flores y emoción.










52. Amor y amistad.

Late el amor en las entrañas de mi cuerpo,
y la amistad vibra latiendo en mi existir,
como ideando mil planes placenteros,
que abren el sol que me ilumina el proseguir.

Pienso en la fuerza que encuentro al regalarme,
el compartir con mis amigos y el sentir,
la percepción de una ilusión dentro del pecho,
que abre las puertas de luz a mi vivir.

Y en el balance me siento un pasajero,
que va llevando sus cuentas al haber,
mientras me afianzo en valores y en el cielo,
que van formando mi modo de querer.

53. Deseando mejoras.

Vivo deseando que lleguen a mi patria,
mejores tiempos de humana dimensión,
que cambie el clima social en que vivimos,
y la cultura descubra educación.

Camino al paso esperando que los cambios,
muy lentamente conquisten la razón,
de nuestro pueblo que en pleno necesita,
el ir forjando de nuevo una ilusión.

Y en mi palabra quisiera ir transmitiendo,
tiernos mensajes que puedan ayudar,
a ir consiguiendo progresos substanciales,
que nos permitan de nuevo despertar.

54. Camino de Reyes.

Camino de Reyes de nobles anhelos,
que esperan un mundo que rime mejor,
y apuntan sus armas de seda hacia el cielo,
buscando presagios de dicha y de amor.

Senderos alegres que esperan sonrisas,
divinos adagios en clave de sol,
dorados sonidos sin pausa y sin prisa,
que encuentran sus notas detrás de un bemol.

Y van renovando su esencia en las horas,
al ritmo que late un jovial corazón,
y cambian su ambiente con poca demora,
al son de una dulce y sencilla canción.










55. Cuestiones legales.

A donde están los derechos de los hombres,
que quieren trabajar en libertad,
con un conjunto de leyes que permitan,
a las personas vivir con dignidad.

Donde comienza el deber de los más fuertes,
de ir ejerciendo el saber y la equidad,
para lograr una cultura algo más justa,
y un mundo nuevo anhelante de moral.

Si solamente pudiera despertarme,
y ver partir a la torta algo mejor,
en mi Argentina la vida iría cambiando,
hacia momentos de hermoso resplandor.

56. Razonamiento y corazón.

Razonamiento y corazón viven mejor en equilibrio,
llenan entones la forma de pensar,
para poder así entregarte dulcemente,
una manera sencilla de pasar.

Y el contenido de tu vida se transmuta,
cuando poder sentir las diferencias,
de los estímulos que vienen del cerebro,
mostrando huellas distintas en la esencia.

Que va llevando emoción y pensamiento,
para poder buscar destellos de algún Sol,
donde se pueda ir encontrando la armonía,
mientras pretendo ir comprendiendo mi ilusión.

57. Esplendorosa.

Hoy puedo imaginarte esplendorosa,
brillante cual dorado amanecer,
y tierna como pétalo de rosa,
que he visto en esta tarde renacer.

Sencilla, inteligente, y precavida,
de dulce contenido en lo interior,
y ardiente como el fuego que se enciende,
después de algunas notas del amor.

Y siento que te espero y que estás cerca,
que luces como estrella celestial,
soñando con futuros inquietantes,
bruñidos del color del bienestar.










58. Recordando amistades.

De vos me acuerdo, de aquellas horas juntos,
en que arreglamos el mundo sin cesar,
mientras cervezas y alguna picadita,
iban marcando el ambiente del lugar.

Recuerdo aquellos días y aquellos compañeros,
con que jugaba en el parque sin parar,
toda la parte partidos soberanos,
que están en mi alma y quieren regresar.

Y cada chica bailando en algún baile,
cada mujer que me acercara hasta el amor,
son mi tesoro que llevo acá arraigado,
en un rincón azul del interior.

59. Sueños amenos.

Pude soñar amenamente esta jornada,
con mil jardines cubiertos de jazmín,
donde he encontrado secretos que ennoblecen,
el porvenir de cada querubín.

Y fue la reina del momento la pureza,
cuando del blanco conjunto vi surgir,
sencillas frases cubiertas de mensajes,
que hacen honrosa la esencia del vivir.

Para poder quedarme lentamente,
como buceando en las aguas del Señor,
y ser feliz en cada imagen generosa,
que me regala la luz del corazón.

60. Todo Navidad.

Ya vamos juntos llegando al nacimiento,
la Navidad nos va acercando su sabor,
en que sentimos el recuerdo del Maestro,
que nos dejara el mandamiento del amor.

Y es el momento de ver humildemente,
con la mirada interior del corazón,
para dejarnos llevar por la nostalgia,
que nos envuelve entre sus brazos de emoción.

Y ser felices de compartir con los amigos,
esta vivencia de bases tan profundas,
que nos permite sentir sencillamente,
toda la magia que hoy día nos inunda.








61. Amigos para siempre.

Igual que ayer, igual que aquella noche,
en que empezamos a hablarnos vos y yo,
pienso que siempre seremos dos amigos,
que van armando senderos de ilusión.

Tal vez mañana vendrán otros momentos,
quizá la risa sea reina del color,
o la neblina se asiente entre los ojos,
pero igualmente quisiera hallarte a vos.

Y caminar serenamente por la vida ,
con la conciencia tranquila de saber,
que en todas partes mi esencia te protege,
y en todos lados me puedes sorprender.

62. De ilusiones doradas.

De ilusiones doradas voy pintando este mundo,
dibujando reflejos con destellos de sol,
que iluminan mi mente y acarician mi almohada,
en mis sueños poblados de mensajes de amor.

De canciones cubierta de riquezas del alma,
voy llenando el cuaderno de mi ser interior,
y en las noches despierto entre luces sagradas,
que me entregan esencias de profunda emoción.

Y entre tanto en mi rima, mi palabra te busca,
quiere hallar a tu pecho resonando al compás,
de sencillas estrofas que te vuelvan dichoso,
y que lleven tu anhelo por senderos de paz.

63. Con ternura sutil.

Quisiera buscarte tranquilo y sereno,
pensando en tu dulce manera de ser,
y darte mis fuerzas confiado y ameno,
de ver tu sonrisa de hermosa mujer.

Con luz y ternura sutil pintaría,
tus ojos que brillan al verme llegar,
y el sol de mi pecho de a poco abriría,
pensando en la dicha de verte soñar.

Y entonces el tiempo quizás sentiría,
perderse en la brisa que ayuda a elegir,
momentos eternos que encienden el día,
y marcan la ruta de un suave existir.












64. Miradas celestiales.

Algo de luz se ve en los ojos de los hombres,
que viven con amor y con piedad,
y siembran sus sonrisas por el mundo,
con dulce inteligencia y humildad.

Es fácil descubrirle en la mirada,
serena idiosincrasia celestial,
que emana de la esencia de sus almas,
cual tierno contenido colosal.

Y sueñan con mostrarle a las personas,
senderos de esperanza e ilusión,
que guíen a la gente por la ruta,
que lleva a ser feliz al corazón.

65. Flores de mi ama.

Con flores divinas que viven en mi alma,
de a poco he formado un hermoso jardín,
que voy mejorando cuidando en esencia,
desde el horizonte hasta el otro confín.

Son sueños dorados que habitan mis horas,
que dan a mi vida señal en color,
y eterna armonía serena elegancia,
dulzura y cariño sincero y amor.

Y en las y en las horas libres las voy cultivando,
nutriendo suelo de tierra interior,
y luego la espera es de sol y alegría,
que harán que ellas crezcan de un modo mejor.

66. Con toda mi esencia.

De estrofa en estrofa se van sucediendo,
mis versos dorados de rima y de sol,
que entrego a la gente feliz y dichoso,
con toda mi esencia de pleno color.

Mi pluma es ligera mi mente está abierta,
y puede expresarte mi forma de ser,
con dulces compases que encienden mis sueños,
y viven en mi alma queriendo crecer.

Y entonces me vuelco en mi nueva poesía,
describo las notas que suenan a amor,
cubiertas de cielo de fe y de esperanza,
seguras de un mundo de luz interior.










67. Regalos del cielo.

Sublimes momentos que llegan al alma,
regalos del cielo, mensajes de Dios,
descubren las luces de sol y esperanza,
y tiñen al mundo de fe y de ilusión.

Preciados matices que dan alegría,
serenos destellos de dicha y color,
llegan a la vida cual suave añoranza,
de tiempos cubiertos de paz interior,

Y en tibias pasiones inundan el pecho,
sugieren caminos poblados de amor,
que encierran seguros, confiables anhelos,
de fuegos dorados de gran esplendor.

Omar de Parque Chacabuco.

Este poema que terminé de escribir el 27/12/03 lo dedico a todos mis amigos y familiares.
Saludos y hasta pronto.
Omar.

[Jose Julian]

<center>

estimado amigo


Nuevamente disfrutando tus lindas composiciones.

es un deleite, pasar por tus extensos poemas+

felicidades amigo

saludos

JOSE JULIAN

[Rose Mary]

Muy hermosos tus poemas.

Feliz noche

[Marcela Lisette]

Muy bellos todos tus poemas, te recorrí “Flores de jardín”, hasta “Regalos de cielo”, como siempre digo es mejor de a pocos pero siempre hay una excepción a la regla no?

Marcela Lisette

[MARION]

Poeta huyyyyy...
ya terminè de leerle.
Y sabe que me encanta.
Usted es un gran escritor
deberìa editar un libro
Lo amerita su talento
Mis felicitaciones.

Un abrazo y mi admiracion

Marion

[SHINNING]

Omar .....

es un placer volver a encontrarte,
ya disfrute de tus poemas en Pv, y ahora vuelvo a deleitarme con la dulzura de tus versos, que siempre tienen un mensaje de esperanza y amor...me quedó prendada de la imagen azul que nos regalas.

un saludo