y en el fondo de tu alma lo sabrías.
Si dejaras de amarme sufrirías
todo el año y el resto de tus días.
Si dejaras de amarme sentirías
tantas penas y tantas agonías
que tus noches serían frías, frías
si dejaras de amarme...aunque te rías.
Si dejaras de amarme no tendrías
un momento siquiera de alegrías
ni en tus sueños aquellas fantasías
que conmigo decías que tenías.
Si dejaras de amarme no hallarías
un momento de paz ni escucharías
una más de mis tantas poesías
que con tanto placer oír solías.
Si dejaras de amarme...¿a dónde irías?
En un mar de dolor te perderías.
De rodillas al cielo pedirías
que volviera contigo. ¿Lo sabías?
Deja entonces de andar con tonterías.
Es inútil...¿te justificarías,
si dejaras de amarme, pues creías
que sin mí felizmente vivirías?
No me dejes de amar. Te dañarías.
Además, aunque quieras, no podrías
y repitas con viejas letanías
que no sientes por mí lo que sentías.
Mejor ámame, vamos. ¿No confías?
Si me dejas de amar te engañarías.
Te aseguro que nunca encontrarías
un amor como el mío...¡No te rías!
Heriberto Bravo Bravo SS.CC
