De sol y dulce tonada de la vida,
se agita un poco al pasar mi corazón,
mientras acaso palpita simplemente,
en cada nuevo latir una ilusión.
Entre los logros que encuentro en el camino,
sueñan mis ojos con luces de neón,
y en la mañana sonrío con ternura,
cuando se dora de amor la percepción.
Y en el sencillo sendero de mis días,
voy conociendo semillas de verdad,
que me conmueven con notas de alegría,
cuando el color puede teñirse de amistad.





