¿Que por qué escribo? No sé.
¿Que en quién me inspiro? Tampoco.
Y no me digas, José,
que ya por eso estoy loco.
Yo simplemente me enfoco
mientras bebo mi café
en un tema y poco a poco
inspirado me hallaré.
Es al amor al que invoco,
al que vino, al que se fue
y al que se llevó el siroco.
Los versos yo los provoco
y al amanecer tendré
versos que apenas retoco...
Heriberto Bravo Bravo SS.CC
