Se abre el otoño sereno en nuestra patria,
y espero haber aprendido la lección,
celeste y blanca sin ofuscarme tanto,
por como suene en el ruedo mi canción.
Se que quizás otros quieran opacarla,
o que se ensalcen luchando contra mi,
pero mi afán es palabra que se empeña,
en darla al mundo el color de mi sentir.
Celeste y blanco y brindando por la vida,
como luchando por nuestro porvenir,
sin comparar si mis estrofas son tal pulcras,
pero volcando en mis líneas mi vivir.




