<font color=BISQUE><p><br><CENTER><p>

QUISIERA II.

Quisiera que, cuando cometa un error,
me perdones con sutil cariño,
decirme con calor maternal precioso,
que no reitere mi desvarío.
Quisiera que, cuando me veas dormido,
me contemples con ensueño de niño,
me arropes con un cálido manto,
de amor que me defienda del frio.
Quisiera que, cuando esté enfermo,
seas tu mi ángel , bello galeno
en mi cabecera siempre, con desvelo,
tus manos y labios sean bendito remedio.
Quisiera que, cuando este triste,
me preguntes ¿Que te pasa amor mío?,
por qué las congojas invaden tu estío
aquí estoy, regocíjate en mi consuelo
Quisiera que, cuando soplen los vientos fuertes,
y amanezcan negras tormentas,
seas la calma y paz de cielo sereno,
se apacigüe las aguas, a un mar tranquilo.
Quisiera que, en el último momento,
cuando tenga que partir a vivir en el firmamento,
un beso de tus labios benditos,
sea bálsamo que adormezca mi sueño eterno.
Quisiera que cuando ya no este contigo,
y solo tu memoria sea refugio sagrado,
me tengas un altar pequeño,
en tu corazón entristecido.

Luis Edmundo
sayarumicha(piedrita dura)
26/07/07

</CENTER><p><br></CENTER><br></TD></TR></TABLE></CENTER><br></TD></TR></TABLE></CENTER>