
Cuando en tus brazos estoy, me acurruco y
en tu cuello besitos dulces deposito, tú
acaricias suavemente mi frente y mi cabello,
mientras yo juego con los pelos de tu pecho,
trazando surcos con las llemas de mis dedos,
¡que delicia! a otro mundo me tramsportas.
Hipnotizada escucho los latidos de tu corazón
inquieto, mis labios recorren sin pudor,
desde tu boca acaramelada, hasta donde
comienza.....lo que me hace perder la razón.
Dibujo tu cuerpo con mis besos, te sumerges
en mis entrañas, vibro, tiemblo, tus firmes
manos aprietan mi cuerpo, reimos de placer,
nos decimos locuritas, que en nuestro
lenguaje de amor, sólo tu y yo entendemos.
Nos fundimos en un solo cuerpo mientras
nuestras lenguas juguetean como niñas, en
un beso apasionado culminan su juego, tus
labios muerdo suavemente, siento que en
otro mundo estamos, dejamos la tierra, no
exciste el exterior, estamos solos tu y yo.
Siento que ardo, una llama de placer envuelve
mi cuerpo, me enloqueces, me llevas hasta
el cielo, toco con mis dedos las estrellas,
le sonrio a la luna, es un mágico viaje a
otro planeta, parece un sueño del que me
niego a despertar, el mundo no existe,
el lecho se estremece al compas de nuestros
cuerpos.
Volvemos a la realidad, despertamos de ese
fasinante momento de letargo, satisfechos y
plenos de ese indescriptible viaje, donde de
otro mundo volvemos.

