El azul cielo me hace recordarte
muchísimo; no tengo la certeza
de verte hoy por está casa del
saber en la cuál les robamos
algo de sus conocimientos a unas
sabias personas.
Salgo afuera de donde se encuentran
estas cajas metálicas llenas de circuitos
y miro con una gran melancolía el
jardín en el cuál se encuentran bellas
rosas y rojos claveles.
Solo al recordarte, siento que vuelo
por un mundo en el cuál solamente
existe y reina tu amor.
Mundo en el cuál veo con estos pobres
ojos lo hermosa que eres interiormente.
Tu forma de ser hace que me enamore
más de ti.
Mis ojos solamente están para verte y
expresarte mi amor que crece día a día
por vos. Como quisiera decirte que muero
tan siquiera por una sabia palabra tuya.
Que cuando me hablas me siento ángel
del creador; que cruzo los mares, las
cordilleras, los océanos, los volcanes,
los continentes.
Por ti sería capaz de llegar hasta el infinito.


6 de octubre del 2003